Dos crías huérfanas de marsupial sobreviven juntas en una reserva para animales en Nueva Zelanda, luego de ser víctimas de ataques tanto ellos como sus madres, estos pequeños animales han recuperado buenos signos vitales.
Barnaby y Chester ingresaron al centro de ayuda para animales Free As a Hawk Refuge en Agosto del año pasado, durante la misma noche. Chester fue llevado a este refugio por una joven que atropelló a la madre en la oscuridad y quién buscó exhaustivamente al animal herido pero sólo encontró a la pequeña cría que salió proyectada de la bolsa materna luego del choque.
Barnaby, por su parte, fue llevado al refugio por un comerciante quien asesinó a su madre y luego notó la presencia de la cría, este pequeño animal recién nacido pudo reforzar su crecimiento con la compañía de Chester.
Taneile Hoare es la dueña del refugio “Free As a Hawk Refuge” en Nueva Zelanda, ella se encargó de alimentarlos con un biberón, lavar mantas termicas para que les mantuviese calientes como en el saco de la madre, y también les ayudó a socializar entre ellos y ayudarlos a ganar un poco de confianza perdida desde la muerte de sus madres.
Los pequeños mapaches han avanzado un largo camino de su recuperación, ambos reaccionaron de forma diferente a la separación materna, Barnaby requería de los cuidados maternales mientras que Chester era más independiente
Los marsupiales cuentan con una bolsa epidérmica que funciona como incubadora para las crías que siempre nacen con un estado de desarrollo muy incompleto y casi fetal, y se arrastran luego del alumbramiento hasta este saco conocido como el marsupio donde lactan hasta completar el desarrollo.
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